
Aprender inglés tiene múltiples ventajas para estudiantes, viajeros, empresarios y profesionales. No solo se trata de tener la posibilidad de comunicarse con nativos, sino que ahora, ante el fenómeno de la globalización, es casi una necesidad. Quienes buscan emprender con un proyecto de negocios no escapan a ese requerimiento de la nueva era.
Por muchas razones, tomar clases de inglés es esencial para avanzar con éxito en el camino del emprendimiento. Está claro que cuando se inicia un proyecto de negocio, uno de los primeros pasos es el financiamiento. Si dominas la lengua, es posible que puedas conseguir inversionistas extranjeros y abrir las posibilidades de crecimiento. Como si fuera poco, en la web se hallan plataformas en inglés donde puedes evaluar proyectos y su rentabilidad, lo cual resulta maravilloso. Aunque el comienzo sea lento, siempre debes pensar en grande. Y si dominas el inglés, podrás expandirte internacionalmente. Estupendo, ¿no te parece?
Aprender inglés para vencer las limitaciones
Un networking completo y eficaz requiere de múltiples contactos. Esta red que debe poseer cualquier emprendedor es imperativa para que su negocio funcione. Cuando se habla inglés esta lista de proveedores, trabajadores freelance, publicistas, distribuidores y vendedores se duplica. Compartir experiencias y asesorarse es más enriquecedor y efectivo si no tenemos barreras lingüísticas.
Igualmente, la clientela estará mejor atendida. Al aprender inglés se pueden resolver situaciones y conflictos de muchas más personas, pues es un idioma generalizado con un alcance mayor que el de cualquier otro. Además, se podrán concretar más ventas independientemente del país al que se quiera llegar. Por ejemplo, para vender un producto en Japón, no es necesario dominar el japonés, pero sí hablar en inglés.
En los negocios, sin importar el producto o servicio que se ofrezca, reina la competencia. Para sobresalir y marcar la diferencia, el inglés es vital. Es por ello que muchos empleadores hacen de este idioma un requisito. Y es que las ventajas comunicacionales y económicas que supone el dominio de la lengua, hacen que el proyecto sea más valorado frente a otros que no lo hacen.
Ayuda y promoción
Las redes sociales, páginas web y blogs son fundamentales en la nueva era. Si se emplean estos recursos en la lengua materna y además en inglés, la promoción y difusión del proyecto es mucho más elevada. Las oportunidades de negocio se incrementan notablemente. Además, estas plataformas pueden convertirse en receptores de experiencias, sugerencias y relaciones con otros emprendedores o potenciales clientes. Establecer alianzas y conseguir colaboradores es mucho más fácil.
Hacer uso de Internet y los dispositivos o aplicaciones tecnológicas diseñadas para las empresas, es más sencillo si se domina el inglés. La mayoría de los portales y herramientas en línea para empresarios emergentes, se encuentran en ese idioma. Acceder a chats de asesoría o páginas de ayuda tampoco se verá limitado si se sabe inglés, así que si quieres emprender, comienza por aprender inglés.